El truco para controlar cualquier negociación desde el principio

Hola,

Llegamos al viernes, y si estás como yo, probablemente te estás preparando para cerrar la semana con broche de oro.

Pero antes de que apagues la computadora y te vayas a descansar, déjame contarte algo que puede transformar la forma en que negocias y consigues mejores resultados en tus ventas: La técnica de anclaje.

Si nunca has escuchado hablar de esto, no te preocupes. Yo también la descubrí hace unos años, y desde entonces no he dejado de usarla.

Básicamente, el anclaje es una forma de establecer un punto de referencia en cualquier negociación.

Es como decir: “Este es el marco en el que vamos a movernos.”

¿Y lo mejor?

Si eres tú quien pone la primera ancla, tienes más control sobre cómo fluye la conversación.

Déjame darte un ejemplo práctico.

Hace un tiempo, estaba negociando con un cliente que quería que redujera mi precio.

Era una conversación típica, él insistía en que otros ofrecían algo similar más barato.

Pero en lugar de entrar en su juego, hice algo diferente.

Desde el principio, establecí el valor de lo que estaba ofreciendo. Le dije: “Sé que podrías encontrar opciones más económicas, pero lo que yo ofrezco no es solo un producto, es una solución personalizada que te ayudará a lograr el resultados que estás buscando”

Eso fue el ancla.

Desde ese momento, la conversación giró en torno a cómo mi propuesta podía resolver su problema, no sobre el precio.

Y sí, cerré la venta.

Lo interesante del anclaje es que funciona en cualquier contexto.

Ya sea que estés negociando un contrato, un aumento de sueldo o hasta una compra personal, establecer el primer punto de referencia te da una ventaja increíble.

Si quieres probarlo, aquí tienes algunos consejos:

Prepárate antes de la reunión. Define cuál será tu ancla. Puede ser un precio, un beneficio clave o un valor agregado que quieras destacar.

Sé específico. Los anclajes vagos no funcionan. En lugar de decir “esto es muy valioso”, di algo como: “Esto te ayudará a reducir costos un 20% en los próximos tres meses.”

Mantén el control. Una vez que pongas el ancla, asegúrate de guiar la conversación alrededor de ese punto.

Ahora quiero saber, ¿alguna vez usaste esta técnica sin darte cuenta? O mejor aún, ¿quieres intentarlo en tu próxima negociación?

Escríbeme, me encantaría saber qué piensas o cómo lo aplicarías.

Nos leemos pronto,

Claudia Ruiz

PD: Para la próxima semana tengo un tema que te va a encantar, es sobre cómo convertir pequeñas conversaciones en grandes acuerdos.

PD2: Porfa no te vayas sin antes dejarme tu feedback aquí 👇🏻